Para que comentar más… una cerveza siempre sienta bien: en todas sus versiones!!
INGREDIENTES:
– 300 ml de cerveza negra.
– 250 gr de cobertura de chocolate
– 200 gr de azúcar.
– 8 yemas de huevo.
– 400 ml de nata
Vertemos la cerveza en un cazo, evitando que salga espuma (para ello la deslizaremos por el borde del cazo).
Agregamos la nata y calentamos a fuego medio, sin dejar de remover con las varillas. Incorporamos el chocolate troceado. Dejamos que cueza sin parar de remover hasta que el chocolate se haya desecho del todo.
En un cuenco mezclamos las yemas con el azúcar.
Retiramos el cazo del fuego y agregaremos la mezcla sobre las yemas, sin dejar de remover para que las yemas no se cuajen.
Devolvemos la mezcla al cazo y la ponemos al fuego hasta que espese.
Dejamos enfríar un poco y rellenamos nuestros vasos de presentación dejando un espacio para luego añadir la espuma. Dejamos que cuaje durante al menos una hora y media. Conservamos en nevera.
Para la espuma:
– 400 ml de nata de montar.
– 1 cucharadita de azúcar glass (este ingrediente se lo puse yo, no venía en la receta original).
– 33 ml de cerveza negra.
Para la espuma calentamos la cerveza hasta que se reduzca 5 minutos aproximadamente . Montamos la nata e incorporamos la cerveza reducida y mezclamos con suavidad con ayuda de una espátula.
Para presentar sacamos los vasitos de la nevera.
Ponemos la nata en una manga pastelera con una boquilla rizada y ponemos una capa de nata en la copa simulando la espuma de la cerveza.